Este post tenía más de un año en la carpeta de borradores.

¿Cómo crear un bullet journal eficaz?

Pues el post tenía escritas unas 4 ideas y … así se quedó… en el olvido de los borradores.

Por algún motivo no lo acabé… no sé por qué, a veces pienso  que las cosas que os cuento por aquí las podéis encontrar en otros sitios, o que voy a generar más ruido del que ya existe en este mundo 2.0.

En varios post he hablado de lo satisfecha que estoy usando esta metodología para organizarme, ¡¡¡Y nunca le había dedicado un post a esta forma de gestionar mejor mi tiempo!!!

Cuando descubrí este método lo asociaba más a la parte creativa, de páginas preciosas, donde el diseño, la creatividad y la originalidad eran el foco… y nada más lejos. Ni si quiera Ryder Carroll, el autor de Bullet Journal  lo enfoca de esa manera creativa. Bueno, creativa en el sentido artístico, porque el BuJo tiene mucho de crear. Crear la vida que quieres, crear el trabajo con el que sueñas. En definitiva, el bullet es una herramienta que te puede ayudar a transformar tu vida.

Había leído muchas cosas sobre la metodología, pero nada como ir a la fuente: el libro. Lo compré durante el confinamiento para Kindle, en esas  primeras semanas encerrados en las que me dió un ataque de aprender, de hacer webinar y de leer. Y fue un acierto (de hecho, si te falta algún regalo de Navidad puede ser un buen regalo para una persona a la que quieres, o tambien un buen auto regalo 😉

Puedes encontrar muchas ideas sobre cómo hacer un buen Bullet, a mi el libro me sirvió de base y luego lo he ido adaptando el método a mi manera y a mis necesidades.

Pero hay una idea que me parece clave para crear un buen bullet journal y es hacer un inventario mental.

Fatiga mental

Carrol habla de la fatiga mental, esa fatiga causada por las innumerables decisiones que debemos tomar a lo largo del dia. Decisiones sencillas y otras más complejas.

Y el problema es que cuantas más decisiones tengo que tomar, más difícil es hacerlo bien. Tomar tantas deciones nos genera fatiga.  Y sí, podemos ir abandonando tomar algunas decisiones, pero … nos persiguen y …  nos agotan.

 “Necesitamos reducir el numero de deciones que nos acechan para poderno concentrar en lo que nos importa” – Ryder Carrol, Bullet Journal.

Y para despejar la mente hay un ejercicio que me encanta:

El inventario mental

A mi pareció una herramienta mágica. Había hecho listas para cosas pendientes, para organizar una cena de amigos, para planificar un viajes (…cuando volvamos a viajar…), para desarrollar un proyecto, para ir al super. Pero nada como hacer un inventario mental.

Un inventario es hacer como una descarga de nuestro disco duro  mental. Una descarga de todas esas cosas que tenemos pendientes y que nunca hacemos. Esa llamada pendiente, ese arreglo en casa, esa idea para el trabajo, ese mail que llevo un mes queriendo escribir pero que algo le retiene…

El inventario mental es tal sencillo como escribir todas esas ideas que nos rondan la cabeza en los momentos más inoportunos en los que además no podemos hacer nada.

Llevarlas un papel me da perspectiva, me saca de la cabeza todas esas cosas que tengo pendientes y que me  incordian, y para las que nunca encuentro el momento y a las que, por tanto, no  dedico tiempo.

Cuando comienzo a descargar esos pensamientos en mi agenda (mejor que una hoja de papel) mi mente se despeja y comienzo  a pensar con más claridad.

Hasta que no escribo una idea, es sólo un pensamiento.  Y al escribirla es como  capturar pensamientos y examinarlo y puedo comenzar a darle otra forma. Y lo que más me gusta:  puedo  enfocarme en lo que realmente quiero.  Sin esas distraciones de cosas pendientes que nos asaltan en nuestra mente. Enfocada en lo que quiero.

¿Quieres trabajar de forma más eficaz? Haz un inventario mental, y si puedes hacerlo ahora, mucho mejor.

Me encantará escucharte si te ha ayudado.

Mi primer inventario fue folio entero, menzclando lo personal y lo profesional, despues fui separandolo para darle un poco más de orden y despues me lo llevé a mi agenda.